miércoles, 9 de noviembre de 2011

6. Yo toca fondo.

Siento haber estado tanto tiempo sin publicar, pero he tenido algunos problemas para hacerlo y todavía no sé si la historia seguirá adelante. No obstante, de momento aquí dejo el capítulo seis. 
También os recuerdo que en la barra de arriba encontraréis el listado de capítulos actualizado. Sin más que decir, espero que os guste y comentéis que os parece la historia. 


NARRADO POR TÚ:

Era incapaz de mirar a Yo a la cara, me dolía. Por eso me marché.
Siguieron pasando los días y me enteré que había discutido con Él. Ahora seguían sentados el uno al lado en clase sin poder hacer nada por remediarlo, no había más mesas vacías, y por si esto fuera poco, además ahora ni se miraban, ni hablaban. Nada de nada. Era como si alguien hubiera levantado un tabique entre ambos.

Todo lo sucedido con Él la había tocado demasiado. Antes Yo siempre iba con una sonrisa en la cara, pero ahora parecía triste y cansada, sin fuerzas de nada. Un día me pidió que me sentara a su lado para explicarle un problema de matemáticas, y me quedé allí todo el trimestre, tratando de hacerla sonreír. Pero Yo no estaba bien, iba de mal en peor. Yo seguía cayendo en picado sin darse cuenta y por mucho que tratara de ayudarla la niña alegre de siempre ya no estaba. Los nervios la atrapaban constantemente, no comía demasiado, se mareaba en clase, había perdido completamente la capacidad de atender en clase y la autoestima. Y para colmo Él se había vuelto completamente indiferente a ella, pero se encargaba de que Yo se enterara de todo lo que le pasaba con su nueva novia.

- Dime que solo es una pesadilla, que nada de esto ha ocurrido nunca. Que en realidad sigue siendo verano y cuando despierte tendré un privado tuyo en el tuenti - me pidió Yo un día.
- Es la realidad Yo, es tiempo de levantarte y vivir las consecuencias. Debes volver a sonreír - le contesté.

A pesar de ello, para que Yo volviera a sonreír tuvo que tocar fondo. Llegó al hospital.

1 comentario:

  1. Qué ganas tenía de un nuevo capítulo :) Pobre Yo... Es difícil sonreír cuando crees no tener motivos para ello. ¡Espero el siguiente capítulo! :D
    Besos.

    ResponderEliminar